Carta de Luis Mari Anson a Fidel Castro, haciéndose pasar por Zapatero (hace ocho años)

A estas alturas, todavía ayer recibí de un familiar mío, como auténtica, la famosa carta de Zapatero a Fidel pergeñada por el infame Luis María Anson (Ansón, con tilde, se llamó durante todo el franquismo, antes de descubrir —gracias a la Democracia— que en euskera no hay tilde; pintoresco individuo). Copio la nota que publicó Juan Cruz en EL PAÍS 25 de junio de 2007:

27281_1«Hace unos meses publicó Luis María Anson sendas cartas supuestas de José Luis Rodríguez Zapatero a Fidel Castro y a Arnaldo Otegi. Eran obviamente falsas, pero estaban construidas de modo que, convenientemente envueltas, pudieran dar el pego. Entonces recibí algunas llamadas de gente, generalmente joven, que se preguntaba por su autenticidad. Anson partía de un ambiente, creado por él y por otros de sus afines, que había hecho creíble que el presidente del Gobierno escribiera cartas así. La broma tuvo su trascendencia; en el último mitin madrileño del Partido Popular, celebrado la víspera de la jornada de reflexión de las municipales, esa carta de Anson/Zapatero a Fidel Castro fue distribuida a los asistentes; hubo una señora que acudió a la Feria del Libro y me la entregó tal como se la dieron, y me contó que vio a mucha gente alrededor recibiéndola. Ayer, en su habitual intercambio de cartas con la directora del Gabinete de Ángel Acebes, Anson se vanagloria de haberlas escrito, y señala, después de llamar "ludópata" a Zapatero: "Del presidente aprendiz de brujo se puede esperar cualquier cosa. Las cartas que yo puse en su pluma dirigidas a Otegui y a Fidel Castro se las ha creído un buen número de lectores porque nada que venga del actual inquilino de Moncloa sorprende ya. Y eso es lo que yo quería demostrar al escribirlas". Ah. Pues a ver qué se le ocurre ahora a este maestro de brujos. No me invento nada si digo que la iniciativa me parece repugnante, y mucho más repugnante aún que se la celebre la jefa del Gabinete de Acebes».

Parece  mentira que estos infundios sigan circulando, aunque son útiles, como indicio del ínfimo nivel en que  mantienen el enfrentamiento político muchísimos politicastros españoles.

2 Comentarios

  1. Enrique dice:

    A lo mejor las confesiones de De la Rosa al infame Nicolás también son otra prueba de Ansón a nuestra credibilidad. Porque yo ya me creo cualquier cosa.

    1. Lo que más trabajo cuesta asimilar es que todo esto es el principio, que aún hemos de ver robos y pelotazos más enormes, con más gentuza comprometida. Cuesta trabajo imaginar quiénes serán los próximos. ¿El propio Rajoy? ¿Aznar? ¿Felipe? Dios, qué asco de vasallos y qué asco de señores.

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